Hace un tiempo leí una nota periodística (por supuesto que no la encontré ahora) que decía que el Google Map hizo que miráramos a la Tierra de otra manera. Y yo no digo que antes no hubieran existido las Líneas de Nazca, y la fotografía cenital de un Yann Arthus-Bertrand; pero creo que, indudablemente, casos como el del pueblo de Inakadate en Japón sólo son posibles a partir de que se instala (se pone de moda, digamos) un punto de vista diferente que aporta frescura a lo ya conocido.
La noticia en el matutino La Nación cuenta que -en 1993- fue el empleado municipal Koichi Hanada quien, buscando la manera de atraer turistas a su pequeño poblado, se le ocurrió la idea de llevar la tarea de unos escolares a una escala mucho mayor. Como sea... la tendencia se instaló y se consiguió con creces el objetivo de promover la circulación de turistas. Los agricultores abrazaron la iniciativa y se pusieron nuevos desafíos. La tradición, la paciencia y la metodicidad de una cultura, y los avances técnicos y agro-técnicos hacen hoy que lo que empezó siendo una plantación ordenada de dos especies de arroz -una de tallo púrpura, y la tradicional (verde)- hoy explote en posibilidades plásticas. En el site oficial del municipio pueden verse varios ejemplos de lo que estoy hablando. Hay algunos más, aquí.
Gracias, Marcelo (¡!).
2 comentarios:
qué groso Fede! muy muy bueno. abrazo.
Nos honra con su visita: Mariano "Coco" Cerrella...
Gracias, maestro.
;-)
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