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Hace poco citaba algunas publicidades antiguas promocionando cigarrillos y tabaco. Llama la atención como, de un tiempo a esta parte, se ha pasado de apañar y promover a esta industria, a combatirla y a condenar -por añadidura- el tabaquismo; como si hubiera proliferado espontáneamente durante tantos años. ¿Bastante hipocresía de los gobiernos, no creen? De cualquier manera... nuestros pulmones, agradecidos :)
Esta campaña de guerrilla marketing que vemos aquí, fue diseñada por la agencia Perfil de Santiago de Chile. Una idea potente: dejar falsos cigarrillos en una acera. Cuando el fumador los levanta se da cuenta que en realidad son volantes doblados en forma cilíndrica. El lema publicitario del Instituto Nacional del Tórax lo dice todo.
Visto en Neatorama, vía How Advertising Spoiled Me.
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