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Hace un tiempo leí una nota en el matutino La Nación que hablaba sobre el auge de las ediciones completas de cómics en formato de alta calidad. Fenómeno este, donde la industria cinematográfica ha tenido mucho que ver (desde Tim Burton y la Batmanía... en adelante). Eso se sumó a que editoras como Marvel, Diamond Comics o Fantagraphics descubrieron que había todo un rango de público, adulto y con un alto poder adquisitivo, que estaba dispuesto a pagar un precio razonable por tener todos los capítulos de sus héroes de infancia.
La gente que tiene estos comics originales quiere estas ediciones -explica Gabriel-. Los coleccionistas no quieren abrir sus revistas para mirar las páginas. (fuente: la nación)
Cambiaron las pautas de consumo: al tiempo que bajan las ediciones tradicionales de historietas en papel de baja calidad y tapa blanda, crecen las ediciones de lujo.¿Quién hubiera pensado hace un par de décadas que ese género popular y bastardo de la literatura y las artes, se elevaría a la categoría de obra maestra?
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