Muchas veces al iniciar la resolución de un trabajo de diseño me pregunto por la versatilidad de ciertas técnicas que adoro como el collage, el fotomontaje, o la letra dibujada a mano... a menudo concluyo en que no tienen pertinencia para mi encargo actual y secretamente envidio sanamente a colegas como Laurie Rosenwald que se mueven con tanta soltura dentro de las técnicas "manuales" sin importar la escala del cliente, la tónica del mensaje, ni los limitantes reprográficos. Vean (con la cabeza abierta) a lo que me refiero.
Vislumbrado en FFFFOUND!
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